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La Seguridad Social asumirá la responsabilidad de las prestaciones para desempleados de larga duración a partir del mes de junio, en un contexto marcado por la reciente reforma de los subsidios por desempleo impulsada por el Gobierno. Esta reformulación ha reducido de ocho a tres las prestaciones asistenciales destinadas a parados de larga duración y aquellos que no han cotizado lo suficiente para acceder al paro. A pesar de esta reestructuración, las ayudas no desaparecen, sino que experimentan una reorganización, pasando de depender del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), con una entrada en vigor prevista para mediados de año, con un subsidio de 480 euros al mes.

 

Subsidio de 480 Euros al Mes

Subsidio de 480 Euros al Mes

 

La Renta Activa de Inserción (RAI), una de las prestaciones afectadas por esta reforma, se dirigirá ahora a las personas desempleadas que enfrentan dificultades económicas. Esta ayuda, que hasta la fecha estaba bajo la tutela del SEPE, busca proporcionar un respaldo económico a aquellos trabajadores que, al agotar el paro, no encuentran empleo de inmediato. La RAI tiene una asignación base de 480 euros mensuales y una duración máxima de 11 meses, con posibilidad de prórroga hasta en tres ocasiones. Es importante destacar que los beneficiarios no están obligados a solicitarla de inmediato tras agotar el paro, sino que pueden hacerlo en cualquier momento, siempre y cuando hayan recibido la prestación contributiva por desempleo en algún momento de su vida laboral.

 

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Con la nueva reforma, la Renta Activa de Inserción será gestionada por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) a través del Ingreso Mínimo Vital (IMV). Estas prestaciones asistenciales, incorporadas en los últimos años, se consideran distintas a los subsidios por desempleo tradicionales, según aclara el SEPE en su página web. Se trata de una partida extraordinaria destinada exclusivamente a personas que han agotado otras prestaciones y subsidios por desempleo. A partir del 1 de junio, la RAI dejará de depender del SEPE, marcando así un cambio en la gestión de estas ayudas.

 

Condiciones y Requisitos para Obtener el Subsidio:

Para acceder a la Renta Activa de Inserción, los trabajadores deben cumplir con diversos requisitos, siendo algunos de ellos:

  • Ser parados de larga duración mayores de 45 años.
  • Emigrantes retornados.
  • Víctimas de violencia de género y/o personas con un grado de discapacidad superior al 33%.

Además, los solicitantes no deben tener rentas superiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), lo que implica ingresos que no superen los 910 euros mensuales, excluida la parte proporcional de las dos pagas extraordinarias. También se establece un tope de rentas para la unidad familiar.

 

Subsidio de 480 Euros: Un Respiro para los Mayores de 45 Años:

Para aquellos desempleados que superan los 45 años y han agotado la prestación por desempleo, el subsidio de 480 euros mensuales se presenta como una opción valiosa. Sin embargo, este apoyo financiero está reservado exclusivamente para quienes no tienen responsabilidades familiares a su cargo. La demostración de bajos ingresos es un criterio esencial, ya que los solicitantes no pueden superar el 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), fijado actualmente en 810 euros mensuales.

Para destacar:

Esta reforma busca adaptar las prestaciones por desempleo a las necesidades cambiantes de la sociedad, ofreciendo una mayor protección a aquellos que enfrentan situaciones prolongadas de desempleo. La migración de la gestión de estas ayudas al INSS y su vinculación al IMV reflejan un enfoque integral hacia el bienestar económico de los beneficiarios. A medida que la Seguridad Social asume un papel más activo en esta área, se espera una transición suave y una mayor eficacia en la entrega de estas importantes prestaciones.